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Nacido en Sirte en 1942 y criado en una familia de pastores de camellos, logró ingresar en la Academia Militar donde aprendió rápidamente las enseñanzas del liderazgo. Con solo 27 años lideró el golpe de estado que derrocó al rey Idris Senussi .

Las importantes reservas de petróleo que se acababan de descubrir en Libia, le permitieron desarrollar sus peculiares teorías políticas, desde el nacionalismo panarabista hasta los principios de la Jamahiriya o Estado de las masas definida en el Libro Verde.

Del “perro loco” de Reagan al excelente estadista de Bush, Gadafi ha ido desarrollando su particular personalidad narcisista y megalómana, hasta desconectarse totalmente de la realidad de su país. A pesar de las ideas de la Jamahiriya, Gadafi siempre  consideró a su pueblo el culpable de todos los males de Libia.

El simbolismo de sus últimos discursos, en especial el que ha pronunciado  en el palacio bombardeado por EE.UU en 1986, enfocando la estatua del puño que aplasta un avión, es ya el último recurso de un dictador que se encuentra acorralado por sus opositores. Apelando a un nacionalismo del que el pueblo ya está cansado, y resucitando clichés como el de Alqaeda, para despertar miedos que hasta ahora le protegían. Los únicos incondicionales a estas alturas son su guardia pretoriana de enfermeras ucranianas, que posiblemente como él, todavía no se han enterado de lo que está ocurriendo en Libia.

Es curioso, pero hace tan solo 2 años, los líderes mundiales, los mismos que ahora reclaman sanciones, se disputaban un encuentro con el coronel durante la reunión del G20 en L´Aquila. Ahora las cosas son diferentes, basta mirar la fotografía y el vídeo, y veremos el final de un régimen de cuatro décadas de tiranía.

httpv://www.youtube.com/watch?v=Dwc8eVAAiu0

© Luis de la Fuente Martin 2011